La gestión sostenible del agua del mundo se ha convertido en uno de los problemas más acuciantes a los que nos enfrentamos hoy. Décadas de mala gestión, inversiones insuficientes y políticas débiles - a menudo debido a una baja apreciación de los diversos valores de los sistemas fluviales saludables o de la gestión adecuada de las aguas subterráneas - han sometido a los recursos hídricos a una presión cada vez mayor.

Pero tenemos ante nosotros una enorme oportunidad: la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) estima que se necesita por lo menos un billón de dólares de inversión anual sólo para el tratamiento de las aguas residuales, las plantas de agua y las redes de suministro. Una proporción significativa de esta cifra está constituida por proyectos con el potencial de convertirse en modelos de negocio sólidos y tener ingresos atractivos para el sector privado.

WWF está trabajando para llenar este vacío de inversión buscando soluciones de agua financiables que protejan y sostengan los ecosistemas de agua dulce en las cuencas prioritarias.